Córdoba

Córdoba de antaño,
como han pasado los años,
tú fundador te observa,
desde lo alto.
La catedral tan vieja,
ha pesar de sus años,
no se queja.
Niños y jóvenes,
caminan por tus calles,
los turistas,
los hermosos paisajes.
Tú sangre corre por los ríos,
el centro y los barrios,
son tú historia.
Las gentes de hoy y las de otros años,pisan tus suelos .
¡Córdoba!, que tanto te amo.

El Amor

El amor es la enfermedad, que aun no tiene cura,
con una profunda agonía y una rápida recuperación.
Es curarse con un si y sentirse morir con un no.
Es aseptar al otro como es, con sus virtudes y defectos.
Es mirar al mundo con otros ojos, ver lo que antes no veía,
lo lindo, hermoso; lo feo, aseptarlo.
Es sentarse horas esperando: una llamada, una persona,
una simple mirada, acompañada por una dulce sonrisa.
Es un ramo de flores.
Es un caja de bombones.
Es un abrazo sinsero.
Es decirle te amo, te quiero, te deceo, a la persona adecuada.
Es sonrojarse ante la mirada y sentir mariposas en la panza.
El amor es al fin, entregarse de cuerpo y alma a la persona,
que elegiste para compartir toda tú vida.

Alguien Me Acompaña Esta Noche

Es de noche,
la luna, se muestra muy calma,
en el patio melancólico,
me deleito al mirarla.
Me dispongo a descansar mi alma,
en el cuarto, la cama,
el rincón de mi amada, esta vació;
ella no se encuentra en la casa.
Estiro la mano y toco,
esta fría la almohada,
aun percibo su aroma,
apago la luz, cierro los ojos,
me cubro con la sabana,
alguien me acompaña esta noche,
¿Eres tú, ya llegaste?
estiro la mano y nada;
que sensaciòn de paz y calma.
Me quedo quietó; ni respiro,
para no asustarla y se valla.
¿Quien cuido mi sueño?
¿Quien lleno la soledad en la cama?
¿Quien me acompaño en la noche?
dando me paz y calma.
me siento en el borde de la cama,
pienso:
Es como si fuera, mi ángel de la guarda.

Porque Te Vas Si No Quiero Que Te Vallas

Por que te vas,
si no quiero que te vallas,
en tus ojos salen,
los últimos rayitos de sol, de tú alma.
Se escapan y no puedo hacer nada,
pero si fue ayer, que me llevabas,
con mi guardapolvo azul y blanco,
a las doce me buscabas,
sonriente, para regresar a casa.
Por el camino te contaba,
 que una nenita me peleaba
¡la pucha!, ¡pero si fue ayer que tú,
me llevabas! .
Te miro y se me hace un nudo en la garganta;
¡como se escapan los rayitos de sol,
y no puedo hacer nada! .
Quiero abrazarte madre
con mis besos cubrir tus ojos,
para que no se escapen por la mañana.
El tiempo deja sus marcas:
De los momentos buenos,
de los momentos malos,
de los dolores del alma.
En tú cara se reflejan
y en la cabellera blanca.
Como se escapan los rayitos y no puedo hacer nada.
Me tiemblan las manos, me dices,
las miras,
agachas la cabeza y callas,
como el ave fénix,
agarras los cubiertos y empiezas,
a darle dura batalla.
Eres una niña con cuerpo de anciana,
eres mi madre y me duela el alma,
me lleno de bronca y grito:
¡Tiempo! ¿porque te vas,
si no quiero que te vallas? .

Dos Corazones Acariciàndose El Alma

El sol entra por la ventana,
cumplido todos los deseos.
Has dormido en mi cama,
las sabanas, aun conserva
tú aroma.
Yo desnudo, tú desnuda.
Dos cuerpos, perdiendo la calma.
Mis manos, descubriendo tus pechos.
Dos vocas, se funden en un beso.
Dos corazones, acariciándose el alma.
Agua tibia callen do en la ducha.
Mis manos, enjabonan tú espalda.
Tierna, te acercas.
Besos, deseo.
Dos corazones, acariciándose el alma.
Fuego, pasión en un instante,
instinto animal, en la ducha y en la cama.