¡Papá! Como seria si estuvieras vivo.

¡Papá!
Ya ha pasado mucho tiempo,
que no te tengo con migo,
alguna veces me imagino,
¡como serias si estuvieras vivo!
Cierro los ojos y te veo,
caminando agachadito,
a tú lado te acompaña,
el bastón tú gran amigo.
Tú rostro demuestra,
el tiempo, que fue pasando,
el caminar espaciado,
como si me estuviera esperando,
pero sé que es mentira,
la imaginación me hace daño,
aun que han pasado muchos años,
¡Viejo!,
te sigo extrañando.
Si me ves sabrás;
que ya estoy terminando,
¡lo que comenzó el abuelo!,
y ahora esta en mis manos,
¡Viejo!,
como me gustaría,
volver a tomar esos mates,
sentados, con la pava humeante,
y charlar, para contarte;
de todos mis problemas,
mientra lo pienso y lo escribo;
¡la pucha que cosa fea!,
¡no tener el consejo de un padre!
Se me llenan los ojos con lágrima,
¡Viejo!,
como nesecito tú abrazo,
miro alrededor y no te hallo;
el corazón se me acongoja,
el saber que tantos lo tienen con vida,
y no saben cuidarlo.
¡Así, como yo!,
y ahora lo estoy extrañando.
Me gustaría decirte que te quiero,
contarte de mis proyectos
de que no perdería el tiempo,
con el celular,
para decirte que te amo,
y que estas en mi ,
a donde quiera que vaya.
A lo mejor quien te dice,
tú, me estas escuchando,
por eso aun que lo estoy escribiendo.
¡Viejo!,
te amo.

La Varilla

Se despertaban temprano,
el desayuno calentito
en la mesa;
las panzas llenas,
las dos camino a la escuela.
Hermosos recuerdos de la niñez;
anécdotas que les oí narrar a mis primas.
La que más recuerdo,
y perdón por mi atrevimiento,
ya que ha pasado mucho tiempo,
algunas escenas,
cambiaron un poquito sin perder la esencia del contenido:
Al regresar del colegio,
mi tía;
por la tardecita,
ponía  a mis primas,
ha realizar las tareas de la escuela,
ella se sentaba en la esquina,
acompañada por una varilla,
¡la pobre!
cansada; se quedaba dormida.
¡Una de esas tardecita!
Se complotaron las muy sinvergüenza,
para vengarse de la varilla.
La quebraron en varios trocitos,
y la acomodaron pedacito por pedacito,
como si estuviera sanita.
Las dos simularon una pelea;
tan fuerte fue la algarabía,
que al despertarse mi tía;
tomo rápido la varilla,
quedandose sorprendida,
cuando observo,
que estaba en pedacitos partida.
Acorrer se ha dicho.
-¡Vengan ya chinitas!
-¡No!, ¡poque nos vas a pegar!
-¡Vengan les digo!
-¡No!, ¡no!
Era una carrera,
unos metros a la derecha,
otros tantos a la izquierda,
agarrándose de la mesa;
hasta que lograban escaparse,
por la puerta. La madre,
cansada y menos molesta,
esbozaba una sutil sonrisa;
para que no se dieran cuenta,
seguro que pensaba:
Mira la imaginación que tienen,
estas chinitas sinvergüenzas.

No Me Ignores Si Te Hablo.

Mirame fijo a los ojos,
quiero que hablemos,
un momento.
No me ignores si te hablo,
tengo el corazón en las manos.
Mi orgullo es mi enemigo,
se me hace difícil enfrentarlo.
Por favor hablemos,
mi amor te lo ruego,
mira tú ya sabes,
los dos;
nos equivocamos.
Hay que saber enfrentarlo,
si tú me amas y yo te amo,
saltemos junto la piedra
que ataja nuestro camino;
por favor no ignores te lo pido,
me está matando el silencio,
mis manos, mis piernas, están temblando.
Mira prepare el desayuno;
está como a ti te gusta.
por favor mírame te lo ruego,
tengo el corazón en las manos.

Así Quiero Ser En El Momento

Vaso lleno con agua,

que quita la sed,

te refresca y da vida.

Palabra que llegan al alma,

solución para el que lo necesita,

rayo de luz en la oscuridad.

Abrazo honesto del buen amigo,

apretón de mano con amplia sonrisa.

Oído dispuesto prestador de tiempo,

sacerdote fiel para el secreto,

amigo no juez y consegero.

Visita inesperada para el enfermo,

caricias tiernas para el abuelo,

gentileza, educación y respeto para los mayores.

Tantas cosas más, quiero ser en el momento.

Camino dividido y con el mismo sentido,

uno fácil y incorrecto,

el otro difícil pero correcto,

lucha interna del corazón,

desición que pesa ,

enseñanza de la vida 

que marcan el destino,

atrapan te situación,

lo bueno lo malo,

lo fácil te seduse,

como el caramelo al niño,

pero dura poco.

Lo difícil tiene su premio,

hay que experimentarlo paso a paso,

cuando lo tienes es para siempre.

Por eso: Así quiero ser en el momento.