Como el agua del río
acariciando las orillas,
en su permanente pasar.
Como tus manos me calman
ese cansancio del alma,
para poder descansar.
Me duermo con el latido
de un corazón enamorado,
cuidando mi despertar.
Yo veo en tus ojos tiernos
algunas marcas del tiempo,
que no se puede ocultar.
Pero son como el lucero
que a pesar del tiempo,
no dejan de cautivar.
En todos esos encuentros
que nos unimos en un beso,
los corazones contento; se ponen a cantar.
Es como un coro del cielo
que bendice ese encuentro,
que es la pura verdad.
En las mañanas serenas
te llevo por los senderos,
para poder caminar.
En el camino del tiempo
con todos los recuerdos,
que el destino nos da.
Algunas noche en silencio
te apareces en mi sueño,
como una reina brillando.
Invitándome a bailar
en ese sublime momento,
mi amor; mi amor contigo se va.
Cuando estoy fuera de casa
mi corazón se me escapa,
y te comienza a buscar.
Buscando por los senderos
esos tus ojos muy tiernos,
que tanto amor me dan.
Buscando por los caminos
tus manos que me dan calma,
y me dejan descansar.
Al llegar a mi casa
me encuentro con mi amada,
que un abrazo me da.
Durmiéndome con el latido
de un corazón compasivo,
que cuida mi despertar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario