que lleva en su vientre,
una vida.
Felices las que lo llevan,
con orgullo,
ese premio del amor.
Un niño de mirada tierna,
le dará el título de madre,
cuando le diga mamá.
Pero la vida también le da,
a otras mujeres,
ese amor maternal,
aún que no puedan llevar
una semillita en su vientre.
Ellas son madres del corazón,
son madre de la vida,
luchando día a día,
por aquellos pequeñitos
que no tienen un hogar.
Ellos están en la vida,
esperando esas caricias,
un ¡ Te quiero hijo !,
que una mamá te lo da.
Allí están ellas,
abriendo su corazón de madre,
esa mujer que sonriendo,
los abraza,
los besa,
les da hasta la última gotita,
de amor maternal.
Los niños,
embriagado por tanto amor,
les otorgan desde su corazón
inocente;
el premio más alto
que se le puede dar,
las llaman, ¡ mamá !.

No hay comentarios:
Publicar un comentario